6 de Diciembre. “Día del Obrero Azucarero” : “PARA QUE NO SIGAMOS BURLANDONOS DE LA DEMOCRACIA”
Para que la falsa narración no nos haga olvidar épocas felices, y un próspero pasado. Para que la mentira y la corrupción no nos roben la memoria
Un grupo de ex obreros del azúcar, manifestamos nuestra preocupación en este emblemático y significativo día.
Hace casi una década, una banda de mal llamados Ocampenses, en beneficios y negociados propios, nos quitaron para siempre, una sirena y un ronco pito, que anunciaban no solo horas laborales sino también, dignidad y seguridad económica para nuestras familias.
Las zafras 2013 y 2014 fueron subsidiadas por los gobiernos nacionales y provinciales. Hubo producción, galpones llenos de azúcar, ventas sin control, balances truchados y estafas entre los propios integrantes de la ZAPEM. Angurrias de poder sin ninguna rendición de cuentas, nos llevan a esta fecha del año 2023 con compañeros que aún no cobran esos sueldos y de cuya quiebra no tienen respuesta. Eternos manoseos legales hacen perder toda la esperanza en la justicia, y vemos horrorizados como los mismos actores que pusieron a Villa Ocampo en esta situación siguen manejando los hilos de nuestro presente y de nuestro incierto futuro.
Los mismos protagonistas de la ZAPEM, cuyo gerente mandamás, contador Diaz, quien era auditado por su socio de estudio Sergio Masin (Transparencia total) y cuyo directorio estaba compuesto por nefastos personajes de la gestión municipal como Lalo José, la Dra. Masin (Actual Jefa de Personal), la Sra. del contador Pablo Diaz, Villaba, etc, etc…
Hoy este insaciable ser es el armador, a su medida de nuestro gabinete comunal, poniendo a manejar sin votos, otorgándole el destino de los ocampenses a su yerno; tan corrupto y sucio como el, ya que su vivienda hecha en el fondo de la casa del suegro, Bv. Sarmiento y Barrio el Porvenir, su estructura está construida por rieles viales de espuria procedencia.
El cambio generacional que tanto se pregonó de las elecciones de septiembre, solo significó un intendente más joven, el manejo de los hilos del poder lo sigue teniendo este inimputable corrupto contador. Desde ese lugar estará buscando para sus ruines negociados, nuevos socios de índole como Alejandro Insulina Varela, para hacer otra estafa parecida a las zafras fraudulentas, otro robo como el de la destilería, que hoy no se sabe a quién vendieron, pero si que es explotada por su socio Sergio Masin. Aún hoy dicha destilería figura en la quiebra Wellber, y son 33 los años que compañeros están esperando cobrar sus créditos.
Solo queda un hilo de esperanza para volver a creer, por más de 80% de los votos la ciudadanía eligió en las últimas elecciones como representante del pueblo a dos jóvenes de distintos partidos políticos pero que tienen algo en común, son hijos y nietos de ex obreros azucareros, a quienes pediremos que asuman este compromiso – que será acompañados por todos nosotros- de conformar una comisión investigadora que contemple examinar las dos últimas zafras, balances, integrantes, la verdad total y absoluta sobre el destino de la destilería, que empresa, proyecto, y cantidad de aportes para la demoninada “Bomba de Insulina” llegó al municipio y otras respuestas que nos debe a los obreros, la saliente gestión Paduán.
La documentación de nuestros reclamos se encuentran en los archivos del concejo.Llos concejales salientes nunca estuvieron a la altura de sus responsabilidades y a pesar de haber contado como oposición con mayoría, muchas veces no investigaron sino que se comenta que fueron persuadidos por los favores del contador.
Pedimos a los compañeros que festejemos nuestro día con el orgullo de haber sido parte de los mejores años de Villa Ocampo.
Demostrado de sobra queda en la sociedad lo que somos y nuestras capacidades, a veces usadas y abusadas, por estafadores que ostentan el poder, compañeros nuestros con salarios en negro entre otras obras, fueron los encargados de hacer las columnas de alumbrado público de toda la ciudad.
Por último, al ser la mayoría de los ex obreros jubilados, repudiamos la manera como se manejó la asamblea del Centro de Jubilados Nacionales, con violencia, patovicas, gritos, abucheos, que desviaron el objetivo de dicha asamblea: “balance y elección”, en violación total a los estatutos pertinentes. Se conformó una comisión a mano alzada de manera ilegal siendo aceptados sin cuestionamientos por todo el arco político.
Compañeros, que el 6 de diciembre no sea una día cualquiera, que sirva para decir, con buenos recuerdos, aquí están los obreros del azúcar, y somos ocampenses.